Alberto Tricarico / Fernando Saad
Universidad Nacional de La Punta
San Luis, 2010
Un libro fundamental
Siempre me han preguntado: "¿Hay algún buen libro de historia del cine?", y siempre contesté: "Bueno, están el de Sadoul y el de Gubern, pero sólo algunos de sus capítulos..." Pero cuando esta Historia del cine de Tricarico-Saad apareció, supe que éste era el libro que siempre quise recomendar. Veamos por qué...
Alejándose de todo enciclopedismo, el libro se estructura con una serie de casi un centenar de crítica de películas, varias de ellas acompañadas con una introducción a determinados autores: los que importan. Allí están Griffith, Murnau, Hitchcock, Mankiewicz, Hawks, Walsh, Preminger, Minnelli, Friedkin, Sautet, Cóppola, Cameron, etc. Elegir la descripción del hecho fílmico, privilegiar los conceptos que algunos directores dispusieron en su puesta en escena, es la más radical de sus aproximaciones. No hablan de la sociedad para hablar del cine, sino que desde los films responden por la modernidad contemporánea. En esa lectura de films, se articula un modo de pensar el cine que, hay que decirlo, se presenta ausente en el panorama editorial de estos tiempos.
Y esto como principio, pues debemos agregar que la escritura didáctica, es de una claridad asombrosa.
Comenzando con Griffith, definen un concepto operativo en cuanto al por qué y al cómo del cine. Definiendo entonces una mirada singular, recorren films que en varios casos obligan -gratamente- a su revisionado.
Como ejemplo, en "Vértigo" de Alfred Hitchcock escriben: "...Tanto en uno como en otro caso, se trata de dos formas de amor lo que mueven a los personajes a realizar determinados actos. El primero (de Scottie hacia Madelaine) puede condenarnos al infierno, el segundo tal vez no nos deje salir de él (el de Midge).", o respecto a Sautet: "El amor en Sautet es vicario. Esto es: las personas van hacia el sexo opuesto porque además de lo que son, representan otra cosa.", o a Carpenter: "...es uno de los autores más extremos en esta oposición sistemática a la modernidad expresada en la mentalidad progresista y liberal que se nos impone[...] Carpenter subvierte todos los pseudovalores de la modernidad, extremando, llevando a las últimas consecuencias sus posturas teológicas desde un catolicismo que no se piensa más allá de lo medieval. pero siempre dentro de una mirada apocalíptica, no puramente histórica." Todos estos ejemplos se multiplican en un abanico de lecturas sobre films que encierran en pocas líneas conceptos fundamentales del cine.
Pensar el cine de esta manera es una abertura que abre una y otras puertas, y el mismo libro presenta una fuerza centrífuga que obliga a pensar la cultura in toto de Occidente.
Si el cine fue el arte central del siglo XX y su oposición a la Modernidad se presentó en la obra de numerosos directores, los autores de esta magistral obra se pueden dar por satisfechos: el libro resuma ideas tras ideas que estos films provocaron en sus miradas.
Extrañamente, aunque en nuestro país no debería extrañar, sólo es posible leerlo en formato digital. Urge la impresión de este material que está muy por encima de la media de estudios sobre cine, y que obliga a la polémica y al debate. Un libro imprescindible.